martes, 16 de febrero de 2010

Sexy Sadie



Me enamoré de tus ojos marrones, que se parecen a la corteza de un árbol cuando los toca el sol. Me enamoré perdidamente de tu silencio, de tu discreción, de tus mejillas rosadas y de tu timidez. Me enamoré de ese afán por pasar desapercibida cuando todas las adolescentes buscaban precisamente lo contrario. Me enamoré de lo que nos enamoramos todos los que en aquel entonces nos fijamos en ti, de ese no sé qué que se te regaba por los poros, de ese aire angelical de tus quince años. Si pudiera identificar tan claramente el momento en que dejamos de amarnos como identifico claramente el momento en que me enamoré de ti no tendría que hacerme tantas preguntas aún hoy en día, no tendría que hacer un esfuerzo consciente para no llorar al escuchar esas canciones que me acuerdan de ti y sólo de ti. Yo también conozco el amor verdadero, el amor comprometido, lo conocí a tu lado y ese tipo de amor no se le da a cualquiera. Sexy Sadie! What have you done?


SEXY SADIE - THE BEATLES - 1968
Sexy Sadie what have you done?
You made a fool of everyone
You made a fool of everyone
Sexy Sadie, Oh what have you done?

Sexy Sadie you broke the rules
You layed it down for all to see
You layed it down for all to see
Sexy Sadie Oh you broke the rules.

One sunny day the world was waiting for a lover
She came along to turn on everyone
Sexy Sadie the greatest of them all.

Sexy Sadie how did you know?
The world was waiting just for you
The world was waiting just for you
Sexy Sadie Oh how did you know?

Sexy Sadie you'll get yours yet
However big you think you are
However big you think you are
Sexy Sadie Oh you'll get yours yet.

We gave her everything we owned just to sit at her table
Just a smile would lighten everything
Sexy Sadie she's the latest and the greatest of them all.

You made a fool of everyone.
However big you think you are.

sábado, 13 de febrero de 2010

Comentarios Inútiles VIII (Cada vez más inútiles)



1. Hablaba ayer con Sergio Hernández acerca de la muerte de JD Salinger, autor de The Catcher in the Rye. De ahí pasamos a Bukowsky y de ahí a la confrontación: ¿Quién es mejor Efraím Medina Reyes o Rafael Chaparro Madiedo? Él decía que le encantaba la forma en que Chaparro le daba voz a los personajes pintorescos de Opio en las Nubes y que lo que había leído de Medina podría haberlo escrito mejor él mismo con un porro en la cabeza. Yo creo que el guionista de La Brújula Mágica no es mejor que el máximo detractor de Gabriel García Márquez. El capítulo número 4 de Érase una Vez el Amor pero tuve que Matarlo (Una guitarra invisible) y el cierre hermoso del libro (Sueño de una zanahoria congelada) hacen que Medina se merezca toda mi admiración. Es violento, pero sensible. Tiene los pies sobre la tierra y ha afirmado que le gustaría sentarse a recitarle poemas al culo de Keyra Agustina. Yo lo haría también. A veces la poética se encuentra en cosas terrenales, mundanas, sucias y no en la inspiración de las hadas y los faunos. Gracias a Medina Reyes conocí a una chica en Internet y gracias a otra chica recibí un libro de Chaparro Madiedo. La de Medina persiste, la de Chaparro ya no existe. Si me toca escoger entre el drogo existencialista y el inconforme sin remedio, si hay que elegir entre el chocoloco y el emputado, si es menester decidir escoger entre el rolo y el cartagenero; Medina Reyes va a ganar todas y cada una de las peleas con el éxito que no tuvo como boxeador. Una vez le escribí a una de sus desaparecidas cuentas de MySpace que esperaba no verlo nunca jamás vestido de liki liki recibiendo un premio de la corona sueca. Me escribió de vuelta: Así sea, brother. Un masaje sexorial en abejitas vale mucho más que un premio Nóbel.
2. Yo tenía 19 y ella tenía 20. Salimos de una fiesta en la que habíamos bailado juntos toda la noche y era por lo menos la tercera ocasión en que eso sucedía. El trayecto de Chipre hasta su casa era relativamente largo y el único CD mío que había en el carro era el Pop de U2. No quería hablar, no quería conducir muy rápido, quería que las luces decembrinas nos alegraran ese momento en que ambos estábamos nerviosos. Pasando por el Teatro Fundadores sonaba Do you feel loved? y yo sonreí como imbécil (como aún hoy lo hago) antes de preguntarle cuándo había sido la última vez que se había sentido realmente querida. Me dijo que había pasado mucho tiempo ya, que habían pasado años. Me detuve frente a la puerta de su casa y al despedirme me armé de valor y le di un beso que comenzó en If God Will Send His Angels y terminó en Last Night On Earth. Le dije que deberíamos querernos y ella aceptó. A la larga no importa cuánto duró aquel romance. Yo la quería, ella me quiso y es lo que importa.
3. Pop es tal vez el álbum más subvalorado de U2. La gente no pudo soportar ver a Bono, The Edge, Larry Mullen y Adam Clayton vestidos como The Village People en el video de Discotheque. 1997 fue uno de los mejores años de mi vida y en gran parte esa sensación se debe a toda la música que descubrí gracias a personajes nuevos, que se acercaban con discos como joyas, que me daban cintas para que les grabara mi música. Pop me encanta de principio a fin y ahí está una de mis canciones favoritas de U2: Gone. Nunca antes como el miércoles pasado (justamente en ese eterno viaje en Transmilenio en que no podía escuchar música) esa canción me había taladrado la cabeza con semejante insistencia. But I’m already gone. ¿Será por eso, mamá? ¿Será por eso?

4. Me llaman de una empresa de cobranzas a decirme que tengo un cobro pre-jurídico porque hace 4 meses no pago la factura del Triple Play de UNE. Digo tratando de estar calmado: Pero yo cancelé ese servicio desde agosto del año pasado. Me responden: Sí, pero aquí aparece que usted debe cuatro meses de servicio. Calculo rápidamente y son $600.000 más los honorarios de cobranza. Me da taquicardia. Pierdo la calma y le digo a la señora que está al otro lado de la línea: - ¿Pero qué les pasa a estos perros triplehijueputas? Ella me sugiere que llame a UNE. El asesor de UNE me dice que tengo una deuda de $9.000 más un interés acumulado de $450 por un par de días que no alcanzaron a entrar en la última factura. Llamo de nuevo a la empresa de cobranzas para verificar la información y me dicen que el saldo es de $45.000 incluyendo sus honorarios. ¿Quiere eso decir que si en vez de deber $9.000 debiera $600.000 sus honorarios cuadruplicarían el monto de la deuda? ¿Quiere eso decir que tengo ir hasta su oficina y pagarles $36.000 por una llamada telefónica? Efectivamente así lo afirma mi interlocutora. Supongo que ahora los canes de triple mala procedencia son ellos. Mejor voy a UNE. Les pago sus $9.000 pesos y asunto olvidado. En todo caso me arruinaron el almuerzo.
5. Al comienzo soñábamos con ir a ver a Coldplay pero nos parecía absolutamente improbable que ese pequeño grupo de Brit Pop llegara alguna vez a pisar suelo colombiano. Ahorramos dinero semana tras semana cuando corrió el rumor, en 2002, de que Lenny Kravitz iba a tocar en Bogotá. Lenny finalmente anunció concierto hace dos años y siendo ya dos adultos con poder adquisitivo corrimos a comprar las boletas. Lenny nunca vino y nos rompió el corazón. El mundo se reacomodó y ya falta poco para que veamos a Coldplay. Además vimos a Depeche Mode y por obra y gracia del espíritu santo fuimos a ver la resurrección de Soda Stereo. ¿Será que para cerrar definitivamente nuestro ciclo de canciones alguna vez veremos a los Stone Temple Pilots?
6. Esta semana dijeron en el noticiero que hace 20 años salió Nelson Mandela de la cárcel. Me acordé de todo lo que hablamos sobre Mandela en el salón de clase en 4°C del LANS. Don Gonzalo decía que era muy importante. Uno cierra los ojos y los vuelve a abrir y se pasan dos décadas. Holly shit!
7. En el año 2002 voté por primera vez en las elecciones parlamentarias y presidenciales. Voté por Jorge Enrique Robledo para el senado y por Álvaro Uribe Vélez para la presidencia. Ya no le creo a la izquierda ni a la derecha. ¡Bah! ¡Son la misma cosa!
8. Hay una diferencia entre la relación y el vínculo. El vínculo no lo da el sexo, ni los besos, ni las salidas, ni andar de la mano por la calle. El vínculo se va tejiendo en cosas más sencillas y se percibe en el momento de mirar al otro y saber que de una u otra forma ya hace parte de uno.
9. Desde que el álbum Sangri La Dee Da de Stone Temple Pilots salió al mercado en 2001 he creído que la canción Too Cool Quennie habla de Courtney Love y Kurt Cobain. Y aparentemente no soy el único (¡Qué tonto pensar que uno es el único en algo!). Buscando información sobre el asunto encontré una entrevista en la que Scott Weiland dice de forma burlona que la canción no habla necesariamente acerca de Courtney, quien es amiga suya. Sin embargo hay demasiadas coincidencias en la letra como para hacerse el de la vista gorda y no pensar que es un chiste de dimensiones monumentales. It’s OK Courtney, what goes around comes around! Kurt está vivo en una novela de Efraím Medina Reyes. Se llama Érase una vez el amor pero tuve que matarlo. Deberías leerla, Courtney, mientras la ley se decide a no devolverte nunca a tu hija.

viernes, 5 de febrero de 2010

Comentarios Inútiles VII

1. No estaba de humor ese domingo. Me senté a escribir mientras se me pasaba la tristeza y Sebas veía en el cuarto contiguo la transmisión de los premios Grammy. Las nominaciones para grabación del año favorecían a cualquiera menos a Kings of Leon. Beyoncé, Lady GaGa, Taylor Swift y The Black Eyed Peas tenían a su favor la popularidad de canciones que fueron palazos a lo largo del año pasado y una potente maquinaria tras de sí. Cuando escuché que los Folowill habían ganado el gramófono no pude hacer más que saltar de la cama y gritar de emoción.
2. Use Somebody es una canción hermosa desde todo punto de vista. El sonido es potente, la letra es delicada y sincera, la melodía está perfectamente construida para la voz de Caleb Folowill y el resultado final es mérito de la banda y los productores Jacquire King y Angelo Petraglia. Es simple y llanamente una canción preciosa.
3. Lo de los Kings of Leon es el mejor ejemplo del rock en familia. Caleb, Jared, Nathan y Matthew Folowill son tres hermanos y un primo que desde que lanzaron su primer álbum en 2003 han pasado progresivamente del rock sureño inicial a sonoridades más propias del rock alternativo. Los hermanos Gallagher no se soportaron más y acabaron con Oasis en 2009, los De Leo reunieron a los Stone Temple Pilots y andan haciendo un disco nuevo, los Greenwood siguen siendo parte fundamental del engranaje creativo de Radiohead. Y eso que estos son apenas parejas de hermanos en bandas de rock. ¿Cómo hacen éstos Folowill que de paso andan con otro primo dentro del Staff? Mucha tolerancia, mucha paciencia, y sobre todo mucho conocimiento. Supongo que una relación tan bonita y frágil como la que uno tiene con los hermanos puede ayudar a crear cosas hermosas y frágiles también. A mí me ha pasado. Toda mi admiración para los Folowill.
4. Cuando se le preguntó a Jared sobre el éxito de Use Somebody como composición afirmó que era una canción sincera. “Para todos es difícil soportar a solas con la presión. Es bueno descargar un poco nuestro peso en alguien y dejar que nos ayude a llevar la carga”. Eso es lo bonito del uso propuesto por Use Somebody. Nos usamos unos a otros, para bien o para mal. Para tener compañía, orientación, para recibir otro punto de vista, para construir amistad, para disfrutar juntos del sexo, para enfrentar un mundo que tiende a ser cada vez más cruel y difícil de llevar y que tiende a empujar a las personas a vivir existencias cada vez más individualizadas y solitarias. No me da pena usar a alguien más, no me molesta ser usado. El mundo de hoy requiere de ello.
5. Creo que a Álvaro Uribe Vélez por fin se le zafó un tornillo. Los decretos de emergencia social podrían perfectamente ser la gota que rebose la copa de la paciencia de los votantesque aún creen que una tercera reelección sería buena para el país. Siempre me ha parecido tonto el caudillismo y es por ello que no puedo declararme uribista ni antiurubista. Ser uribista es desconocer los errores del presidente y ser antiuribista es desconocer sus méritos. No suelo tratar temas políticos a través de mis textos, pero sí quiero opinar aquí de forma pública que considero que una segunda reelección consecutiva sería dañinísma para Colombia y para la salud mental de Álvaro Uribe Vélez. ¿Por qué? Porque la concentración de poder enloquece. ¿Queremos una muestra? Miremos hacia Venezuela. Es posible que el australopiteco que gobierna nuestro vecino país no haya llegado al Palacio de Miraflores con las macabras intenciones de convertir a Venezuela en el infierno que es en la actualidad, pero el paso del tiempo y la concentración de poder definitivamente hicieron mella en la ya de por sí deteriorada salud mental de Hugo Chávez. Tanto Chávez como Uribe se tienen muchísimo amor propio y consideran tener también una misión mesiánica de salvación de sus pueblos. Cada nueva elección, cada confirmación de poder, cada halago recibido de parte de los súbditos de estos megalómanos aumenta su delirio de grandeza y puede llevarlos a cometer las estupideces que cometieron en el pasado grandes líderes que se fueron a pique como Adolfo Hitler o Napoleón Bonaparte.
6. Sí. La tercera estrofa de Motor (la undécima canción del álbum Nocturno de Gatoblanco) habla de Hugo Chávez. También es cierto que Cinema (la pista que abre el disco) habla de mi obsesión por Natalie Portman.
7. Bautizada originalmente como Natalie Herslag, mi amor platónico nació el 9 de junio de 1981 en Jerusalén, Israel. Es piscóloga de la universidad de Harvard, es vegana desde los 8 años de edad, afirma no consumir alcohol ni drogas y mide 1,58. ¡Lo tiene todo para conquistarme! ¡Es perfecta! Es inteligente, tiene una cara absolutamente preciosa, es pequeña y delgada, su proporción cintura/cadera es generosa, se desenvuelve con gracia en las entrevistas y si se rie lo hace con ganas. No sé a qué huela, eso sí. Habría que olerla antes de decidirme a embarcarme en una aventura romántica con ella.
8. La astróloga Susan Miller (www.astrologyzone.com) dice que las relaciones de pareja entre Leo y Géminis tienden a dar muy buenos resultados siempre y cuando el león respete la libertad y la individualidad del gemelo y éste le tribute a su vez la adoración que el otro requiere. Ahora bien, si el destino me diera una oportunidad con Natalie Portman le propondría que huyéramos de la bulliciosa vida nocturna de Manhattan. La traería a Colombia donde podría hacer uso de su talento como actriz en las producciones de ficción de RCN y Caracol. Eso sí, Natalie tendría que aprender español y cambiarse el nombre a uno que los colombianos pudiéramos pronunciar (yo pensaría en algo literal, como Natalia Portero… Natalia Portero de Naranjo si la cosa prospera). De no poder hacer una carrera en la farándula criolla Natalia podría empezar a ofrecer consultas particulares como psicóloga, o afiliarse a una EPS y trabajar bajo los nuevos decretos que revolucionarán el sistema de salud. Si ella insiste, podríamos tener un par de hijos que – infortunadamente – no tendrían un potencial de desarrollo de estatura muy prometedor, pero sí tendrían un alto riesgo de ser brillantes como sus padres, o al menos hermosos como la mamá. Después de un tiempo, cuando ya estemos maduritos, me llevaría a Natalia a vivir a Manizales. Iríamos a Chipre los fines de semana a comer helado o bajaríamos a Santágueda a tomar el sol en nuestra cabaña y a leer juntos. De vez en cuando, eso sí, visitaríamos a su familia en Israel y en Estados Unidos, para que no diga que estoy irrespetando su libertad y termine dejándome para siempre y yo maldiciendo la hora en que no le hice caso a Susan Miller.

martes, 2 de febrero de 2010

Format C://El Principito



Decidí que ya era suficiente y que no tenía por qué aguantarme un día más ese maldito Windows Vista que por muy original y por mucha licencia incluída y por mucha garantía de Dell que tuviera, simple y llanamente me sabía a cacho. Saqué copia de las cosas necesarias, le pedí a un amigo una copia de Windows 7 (Format C:) y listo. Mi computador quedó como nuevo. Ni una sola canción, ni una sola foto, ni un sólo rastro del uso que le di durante 10 meses.
Dos días más tarde, mi amiga Lina Serna me devolvió un libro que le había prestado meses atrás y que estaba destinado a formatearme a mí para iniciar febrero sin una canción, sin una foto, sin un solo rastro de preocupación en mi cabeza: El Principito.
No recuerdo qué edad tenía cuando leí El Principito, pero sí recuerdo que lo hice durante una Semana Santa en Ibagué. Mientras Manolo ardía de fiebre gracias al sarampión, yo leía y leía.
Y en aquel entonces me pareció simplemente una historia agradable. Tenía toda la lógica, todo el sentido, toda la magia de la infancia.
Ayer, primero de febrero de 2010 (01022010), con 28 años de edad, volví a leer El Principito mientras hacía dos viajes en Transmilenio. Fue reconfortante recordar que en realidad lo importante siempre es invisible a los ojos, que las guerras eternas entre las flores y los corderos siempre serán más interesantes que todas las sumas del mundo, que al entablar vínculos no hacemos más que domesticarnos, que con el paso del tiempo las boas con elefantes en su interior comienzan a lucir como sombreros y que las cosas de la vida hay que vivirlas como vengan (sin hacernos preguntas, como si fuéramos niños) porque es de esa forma que son maravillosas.
¿Para qué angustiarnos con preocupaciones, con sumas y con restas si la vida siempre encuentra la forma de darnos lo que nos merecemos?