Pápulas, pústulas, nódulos y quistes; finales infelices de un proceso natural. Mi caso no es tan grave como para recurrir a retinoides tópicos, así que podemos dar a todo un final más poético.
El propionibacterium acnes coloniza los folículos taponados gracias al trabajo excesivo de mis glándulas sebáceas. En cuestión de horas aparece la lesión, el comedón abierto o el comedón cerrado. Y tal vez no es uno, tal vez son cinco, diez lesiones de las que no puedo hacerme cargo porque vienes a verme.
Vamos al parque después del almuerzo, encárgate tú de drenarme bajo el sol. Que digan lo que quieran los curiosos transeuntes. Amor vincit omnia y su génesis es casi siempre un proceso natural.
Me ha salido uno de esos horrorosos sobre el labio bajo la nariz y yo grito Nooooooooooooo! y odio drenarme, así que tu entrada me esta haciendo recordar que estoy molesta con esa parte de mi cara.
ResponderEliminarLo que pasa es que me da risa que haya tanto alboroto con las personas que hacen ese tipo de cosas en público. Creo que es una exposición de nuestra condición de primates. A la larga un par de chimpacés desparasitándose mutuamente no tienen nada de horroroso, es la naturaleza actuando.Y bueno, nuestra civilización es arrogante y condena a los primates que salen al parque a drenar sus comedones bajo el sol en vez de hacerlo en la privacidad de sus baños y frente al escarnio propio al que nos somete el espejo.
ResponderEliminarBuen punto de vista, la pregunta es, ¿Tu lo harías?
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